¿Cómo saber si es el momento de reformar la instalación eléctrica?
Reformar la instalación eléctrica: ¿cuáles son las señales de que ha llegado el momento de hacerlo?
Reformar la instalación eléctrica es una de esas tareas que tarde o temprano hay que afrontar en todas las viviendas o locales comerciales. Es evidente que todo se deteriora con el paso del tiempo y las instalaciones eléctricas no son diferentes: llegará un punto en el que una instalación defectuosa empezará a provocar fallos que nos complicarán bastante la vida.
Y no solo eso, por cierto: las humedades en las paredes o las grietas pueden provocar un deterioro estético de la vivienda o afectar a nuestras propiedades, pero los fallos en la instalación eléctrica pueden -además de todo lo anterior- poner en riesgo a las personas.
Las cuatro señales más habituales de que una instalación eléctrica está defectuosa y ha llegado el momento de revisarla son las siguientes:
Sobrecargas
Se producen cuando se conectan demasiados aparatos como para que la red eléctrica pueda aguantarlo. En los peores casos, la temperatura de los enchufes se dispara y pueden llegar a quemarse. Con una instalación eléctrica en malas condiciones, las sobrecargas serán mucho más frecuentes.
Cortocircuitos
Se producen cuando el aislamiento de los cables está demasiado deteriorado como para cumplir con su función. Son muy peligrosos y pueden dar lugar incluso a incendios.
Descargas
Son frecuentes cuando se han realizado arreglos informales en la instalación, que se deterioran con gran rapidez. Si algún miembro de la familia toca un cable pelado, puede llegar a electrocutarse.
Subidas de tensión
Los picos de tensión son un riesgo sobre todo para los electrodomésticos y otros aparatos permanentemente conectados a la red eléctrica: si el cuadro general de luz de la casa no cuenta con una protección adecuada, los aparatos pueden dañarse de forma irreparable.
¿Hay señales de deterioro previas a estos problemas tan graves?
Sin duda, sí: no es necesario esperar a que nuestra instalación eléctrica esté tan deteriorada para darnos cuenta de que hay un problema.
Hay cuatro “avisos” que se producen con frecuencia y que pueden indicarnos que es el momento de revisar la instalación:
- Cambios aleatorios en la intensidad de la luz que emiten las bombillas.
- Saltos en el diferencial de la luz sin que haya un motivo evidente para que se produzcan.
- Incrementos extraños en la temperatura de los enchufes.
- Chispazos frecuentes en algunos enchufes.
En cualquiera de estas cuatro situaciones, no lo dudes: ha llegado el momento de reformar la instalación eléctrica.
¿Cuánto cuesta reformar la instalación eléctrica de una vivienda?
Hay numerosos factores que influyen en el precio de este tipo de trabajos: tipo de cableado, cuadro eléctrico, número y tipo de enchufes, mano de obra…
Por poner una cifra orientativa, para un piso de alrededor de 90 m2 con entre 50 y 60 tomas de corriente e interruptores y unos 20 puntos de luz (lo que incluye tomas de antena, salidas de teléfono, puertos Ethernet, etc.), podemos calcular un presupuesto a partir de los 6.000€.
Los beneficios, no obstante, están a la altura de la inversión: una instalación eléctrica renovada puede durarnos en buenas condiciones alrededor de una década; es decir, una década de tranquilidad en la que ni nosotros ni nuestros electrodomésticos deberíamos sufrir ningún problema.
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