Parquet o tarima: ¿en qué se diferencian y cuál deberías elegir?
Diferencias entre el parquet y la tarima flotante
Parquet o tarima: a la hora de reformar una casa, esta es una de las grandes decisiones que debemos tomar. Y es una decisión importante, sin duda, que debe ser meditada cuidadosamente porque, una vez instalado uno de los dos tipos de suelo, el cambio puede llegar a ser realmente costoso. Por lo tanto, es muy recomendable considerar los pros y los contras del parquet y la tarima y elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades.
El parquet es un tipo de suelo que está formado por tablillas de madera con un grosor de aproximadamente un centímetro y, por lo general, no más de cuarenta y cinco centímetros de anchura. Para instalar el parquet, el suelo que haya en la vivienda debe ser retirado.
La tarima, también conocida como tarima flotante o parquet flotante, puede estar hecha de madera o ser una imitación de ese material. Es más fácil de instalar porque no es un auténtico suelo, sino que se coloca sobre el que haya en la vivienda.
Principales características de la tarima
Existen tres tipos de tarima flotante, cada uno de ellos con sus propias características:
- Suelo laminado. Son tableros fabricados en fibra prensada. Su principal característica es que son muy resistentes al deterioro y el paso del tiempo.
- Suelo vinílico. Un tipo de tarima muy resistente a la humedad, aunque debe ser tratado con sustancias que ofrezcan protección adicional para que no se decolore.
- Tarima maciza o multicapa. Es una tarima formada por capas de varios materiales, cubiertos por una superficie de madera muy resistente.
Principales características del parquet
- Está hecho de madura natural. Por lo tanto, puede sufrir cambios en función de variables como la humedad o la temperatura.
- Es resistente. Está formado por varias capas de madera, con un núcleo sólido y una capa superficial que queda visible.
- Suele tratarse con varias capas de lacado o aceites protectores.
- Debe tener un grosor mínimo de 2,5 milímetros, según la normativa europea. Si el grosor es menor, no se considera parquet.
Parquet o tarima: ¿cuál deberías elegir?
A la hora de decidir entre parquet o tarima, hay tres aspectos clave que debemos considerar: facilidad de instalación, cualidades estéticas y trabajos de mantenimiento.
- Facilidad de instalación. Gana la tarima flotante: como ya hemos mencionado, se coloca sobre el suelo actual de la vivienda, sin necesidad de trabajos complejos. La instalación del parquet, en cambio, sí que suele implicar hacer obras.
- Cualidades estéticas. Esta es una cuestión subjetiva, aunque se tiende a considerar que el parquet tiene mejor aspecto, ya que normalmente está fabricado con maderas de mayor calidad. No obstante, las tarimas presentan diseños más variados que pueden imitar todo tipo de texturas.
- Trabajos de mantenimiento. El mantenimiento de la tarima es más sencillo, pues puede limpiarse simplemente con una fregona, agua y un poco de jabón. En cambio, la limpieza del parquet requiere usar productos específicos; además, debe ser acuchillado cada cierto tiempo y, en general, soporta peor los arañazos.
Sabiendo todo esto: tarima o parquet, ¿cuál sería tu decisión? Si aún no lo tienes claro y quieres saber más sobre estos dos tipos de suelo y todas las demás alternativas que tienes a tu disposición para la reforma de tu vivienda, déjate asesorar por Probiak. Somos tu empresa de obras y reformas en Bilbao: un equipo multidisciplinar con años de experiencia a tu servicio.
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